"La visualización es la punta del 'iceberg' de los sistemas de información geográfica (GIS)"

Villaescusa indicó que, cada vez más, las administraciones públicas están valorando el dato como algo de utilidad, tanto para organización interna como de cara a la ciudadanía. Por eso, afirmó, hay una clara concienciación en el sector público de que ese dato debe ser veraz, para que se pueda utilizar y enriquecer con otra información. Asimismo, otra tendencia apunta a la inteligencia artificial (IA), ya que las autoridades ya no sólo quieren saber lo que está pasando, sino que también quieren simular y predecir lo que va a pasar en el futuro. 

En ese sentido, los gemelos digitales se han posicionado como una de las herramientas por excelencia de las administraciones públicas, con las que pueden anticiparse a situaciones (como flujos de turistas o desastres naturales) y tomar decisiones mejor informadas. 

Esri cuenta con diversos clientes del sector público, aunque destaca tres casos en los que las administraciones están utilizando la tecnología GIS. Uno de ellos es el proyecto que hicieron con la Junta de Castilla y La Mancha. El gobierno regional ha creado un gemelo digital para impulsar la eficiencia energética de la comunidad, que permite calcular la capacidad de radiación solar de cada ayuntamiento al mapear los tejados y las parcelas disponibles. 

Por su parte, el Concello de Vigo también ha apostado por un gemelo digital en 3D de la ciudad, que integra información de StreetView y un catastro de las infraestructuras en formato BIM, y que les sirve de base para realizar simulaciones de todo tipo, como por ejemplo, para responder ante riesgos naturales, como inundaciones, y ver qué cortes o evacuaciones son las más adecuadas. 

Madrid tampoco se queda atrás. Durante la borrasca Filomena en 2021, el municipio integró en una plataforma la información actualizada en tiempo real de los servicios de limpieza de calles, que permitió a las ambulancias y a la ciudadanía en general saber qué vías estaban despejadas de nieve.

Villaescusa ve una tendencia en la que es la principal industria de Esri, el turismo: la de los destinos inteligentes, es decir, ciudades turísticas que sean sostenibles y que estén alineadas con la idiosincrasia de la zona. 

En un ejemplo de colaboración en el que participan diversos stakeholders, como el Ayuntamiento de Sevilla, la Universidad de Sevilla y Orange, entre otros, la capital andaluza ha puesto en marcha un piloto para determinar un mapa del tráfico peatonal del centro, que les ayude a gestionar la ciudad en épocas específicas de mucho turismo, como Semana Santa. La tecnología de Esri les permite realizar análisis predictivos de la cantidad de peatones por tramos de calles, para establecer distintos servicios, realizar desvíos, etc.

En el caso de Granada, el Ayuntamiento ha combinado la información urbanística de las calles con sus niveles de accesibilidad, para otorgar a las personas rutas accesibles según su tipo de movilidad.

La consejera delegada de Esri explicó que, en la producción de petróleo se generan microplásticos que, en el proceso, se van perdiendo y provocan una fuerte contaminación. Para mitigar este problema, Repsol utiliza tecnología GIS para mapear, a través de cámaras de alta precisión, en qué partes del ciclo se producen estas pérdidas de microplásticos y evitarlas. Además, con la inteligencia artificial son capaces de diseñar modelos del impacto que estos contaminantes pueden generar en determinadas zonas y realizar las actuaciones pertinentes.

Con el Cabildo de La Palma, el GIS se conectó con los datos de su sistema de business intelligence (BI) o smart island, que mide variables medioambientales como la temperatura o el viento. El sistema de Esri, que fue desplegado de forma rápida en la nube gracias a tecnologías low code y no code, permite ejecutar análisis en tiempo real y ofrecer esa información a los agricultores y a la ciudadanía.

En el sector de las infraestructuras y la construcción, “la tendencia es el BIM [Building Information Modeling], es esa palanca de digitalización de este tipo de empresas”, señaló Villaescusa. En este ámbito, “el GIS se utiliza para coordinar todos los trabajos que intervienen en el ciclo de la construcción, para tener una visión holística en el proceso de ejecución de la obra y para hacer los reportes finales". Entre los clientes de Esri figuran FCC y OHLA.

También trabajan con el Ministerio de Transportes en un proyecto pionero en Europa. Se trata de la iniciativa Redes Transeuropeas de Transporte, que busca mapear todas las redes prioritarias de transporte con el objetivo de facilitar la comunicación de personas y mercancías en la Unión Europea. Así, Esri ha ayudado al Gobierno español a conectarse a los servidores de datos de todas las compañías de infraestructuras del país (puertos, aeropuertos, carreteras, ferrocarriles, etc).

El análisis de negocio es un sector donde Esri cuenta con diversos clientes. Sin embargo, según Villaescusa, éstos no están abiertos a compartir sus experiencias con GIS debido a que lo consideran parte de su estrategia de negocio y una ventaja competitiva clave. A pesar de lo anterior, la consejera delegada explicó que, a grandes rasgos, las empresas que utilizan estos sistemas geoespaciales lo hacen para conocer dónde están sus clientes, dónde abrir nuevas tiendas, personalizar su oferta por zonas, optimizar desplazamientos, entre otros.

En la educación, los usos de GIS van desde la gestión de los edificios y ahorro de energía en los campus en la Universidad Politécnica de Madrid, hasta la generación de contenido didáctico para estudiantes (por ejemplo, un mapa que muestra a los escritores más relevantes de cada país).

Esri también trabaja con organismos sin fines de lucro en proyectos que mapean el desperdicio de alimentos o que permiten visibilizar la información de servicios y ayudas durante emergencias, entre otros. Asimismo, como dato anecdótico, la compañía también ha utilizado su tecnología para crear escenarios hiperrealistas en películas como Zootopia, Blade Runner (2017) o Los Increíbles.